La Convención Reformadora de la Constitución de la provincia de Santa Fe resolvió este miércoles una modificación histórica: el territorio santafesino no tendrá religión oficial.
El cambio se plasmó en el artículo 3 de la Carta Magna provincial, que hasta ahora establecía: “La religión de la Provincia es la Católica, Apostólica y Romana, a la que le prestará su protección más decidida, sin perjuicio de la libertad religiosa que gozan sus habitantes”.
Con la reforma aprobada, el nuevo texto pasará a señalar: “La Provincia no establece religión oficial, asegura la distinción entre el orden civil y el religioso. La relación entre el Estado, las iglesias y los cultos legalmente reconocidos, se rige por los principios de autonomía, igualdad, no discriminación, cooperación y neutralidad”.
De esta manera, Santa Fe se suma a la tendencia de fortalecer la separación entre Iglesia y Estado, garantizando un marco normativo más amplio de libertad religiosa y de igualdad entre credos.
La decisión fue uno de los puntos más debatidos en la Convención, ya que implica dejar atrás una definición histórica que regía desde la sanción de la Constitución provincial y que establecía un vínculo privilegiado con la Iglesia Católica.