La Municipalidad de Rosario aplicó fuertes sanciones a dos conductores que fueron detectados circulando más de 100 kilómetros por encima de la velocidad máxima permitida. Ambos recibieron multas millonarias, fueron inhabilitados para conducir y deberán realizar cursos de sensibilización vial.
Según informaron desde el municipio, estas medidas se enmarcan en las acciones de control y prevención destinadas a reducir conductas que ponen en riesgo la vida de automovilistas y peatones. En paralelo, se fortalecerá el sistema de alertas tempranas en coordinación con el Gobierno de la provincia, con el objetivo de identificar y suspender preventivamente a los conductores peligrosos.
En uno de los casos, la Secretaría de Movilidad y la Procuraduría detectaron a un Ford Mustang que, en varias ocasiones, superó ampliamente las velocidades máximas establecidas. Una cámara de videovigilancia registró al vehículo circulando a 166 km/h en avenida Sorrento al 6400, donde el límite es de 60 km/h.
Por esta infracción, el Tribunal de Faltas sancionó al titular del rodado en rebeldía con una multa de 3,7 millones de pesos e inhabilitación para conducir, lo que derivó en la entrega de su licencia.
Un autorizado a manejar el mismo vehículo también fue sancionado luego de reconocer que había circulado a altas velocidades en la misma zona. Su falta más grave fue transitar a 130 km/h. Ahora, ambos deberán afrontar las multas millonarias, cumplir dos años de inhabilitación y asistir a cursos de concientización vial.
Fortalecimiento del sistema de alertas tempranas
Paralelamente, la Municipalidad de Rosario refuerza el sistema de alertas tempranas en articulación con el Gobierno de Santa Fe, con el fin de mejorar la seguridad vial y construir un tránsito más seguro.
El mecanismo funciona de la siguiente manera: si un vehículo acumula al menos cinco infracciones graves en un plazo de dos meses —como exceso de velocidad, alcoholemia positiva, participación en picadas o cruce de semáforos en rojo—, el municipio informa la patente a la Agencia Provincial de Seguridad Vial. Allí se dispone la suspensión preventiva de la licencia de conducir, sin necesidad de un juicio previo del Tribunal de Faltas.