Mientras los costos suben y la nafta no para de aumentar, la empresa anuncia nuevos “aumentos” de apenas $300 sobre los pedidos de $3500, que son los que menos salen. “Una vergüenza”, sostienen desde el gremio que nuclea a los repartidores.
“Estas empresas nos condenan a la precarización y la miseria”, argumentan. Detrás de las promesas de “flexibilidad horaria y de ser tu propio jefe” se esconden horas de conexión sin pago, tarifas congeladas y una empresa que se llena los bolsillos a costa de nuestro esfuerzo”, aseguraron.
- Basta de explotación.
- Basta de aumentos falsos.
- Queremos derechos laborales, actualización por inflación y condiciones dignas de trabajo.
Desde el Sindicato de Cadetes y Repartidores de la provincia de Santa Fe, “tomamos como un insulto este falso aumento e invitamos a todas y todos los repartidores a organizarse con nosotros, porque solo a través de la lucha sindical podemos terminar con estos abusos”, finalizaron.