La Asociación Casco Histórico de Rosario llevó a cabo un relevamiento de las expectativas para este día del padre y sobre los feriados de la semana próxima.
Según arroja el dato de la consulta que llevado adelante la Asociación Casco Histórico de Rosario, alrededor del 95% del comercio de la ciudad, va a estar cerrado este próximo lunes feriado 17 de junio, paso a la inmortalidad del General Martín Miguel de Güemes. El escenario para el fin de semana largo, jueves 20, paso a la inmortalidad del General Manuel Belgrano y el viernes 21, feriado con fines turísticos, será distinto por cómo se trabajara el día viernes.
Para el día jueves, se espera un escenario similar al día lunes, con apenas un poco mas de apertura hacia las primeras horas de la tarde, esto sucede en feriados donde abren sus dueños y la continuidad de la apertura depende del circulante de personas en la zona de su comercio.
Para el día viernes feriado, se espera una apertura normal del comercio al igual que el día sábado.
Expectativas para el día del padre.
Para este día del padre, se espera una mejora en las ventas respecto a meses anteriores, ya que no hubo fechas claves comerciales para comparar, por lo cual, resta esperar para hacer una comparación interanual, cifra que se estima será inferior al 2023, producto de la crisis económica que viene sufriendo el comercio en general, por la caída del poder adquisitivo de los consumidores.
“Sin embargo, este día del padre, agasajos habrá, aunque habrá que ver si estarán acompañados por un presente o no. También estamos atento al sector gastronómico, que los últimos años fue clave para tener el termómetro de la actividad, ya que, llevarlo a papá a almorzar junto a la familia, se ha transformado en un clásico rosarino o si se ha preferido festejarlo en casa”, indicaron desde la asociación.
El comercio viene resistiendo a la espera de un repunte.
En nuestras charlas con comerciantes de toda la ciudad, al consultarles como hacen con la caída en ventas que vienen teniendo los últimos meses para poder soportar los compromisos que supone tener las persianas abiertas de sus comercios y las respuestas son variadas, pero podemos hacer una diferenciación en dos grandes grupos, que, aunque tienen los mismos compromisos, los primeros son propietarios y los segundos alquilan y sumado a esto están los que lo hacen en sitios que tienen que afrontar gastos centrales.
De nos dan crédito los proveedores, tenemos mucha mercadería y podemos ofertar, a sacamos un crédito, pedimos a familiares, amigos para pagar los sueldos.. hay todo un universo de razones que nos dieron por la cual aun no vemos cierres que nos alarmen como sucedió en pandemia, sin dejar de lado el componente emocional de tener que cerrar un comercio en contra de su voluntad, para un emprendedor es un golpe más duro que el hecho de no vender.
Lo bueno de todo esto es que aun el comercio de Rosario esta en carrera, con dificultades, pero lo está. Hasta cuando seguirá la crisis? No lo sabemos, intentar seguir bajando la inflación sacrificando el mercado interno debe tener un final, sino el correlato directo ya lo vivimos en otras épocas, cierres de comercios, desocupación y largas filas para conseguir un puesto de trabajo.
De preferencia, aunque es más largo el camino, se podría haber bajado la inflación a través de un plan agresivo y audaz de desarrollo industrial y productivo, lo que hubiese redundado en todo lo contrario, en mas actividad, empleos de calidad y más inversiones, expresa el comunicado.