Miguel Ángel Russo sigue internado producto de una infección urinaria en la clínica Fleni del barrio porteño de Belgrano.
El técnico de Boca ingresó el lunes a una serie de controles, pero los mismos no resultaron del todo alentadores por lo que el martes volvió ya para pasar la noche en la clínica, internado en una sala común, con suero y antibióticos.
Este miércoles, la intención del técnico de 69 años de edad era seguir dirigiendo y participar de los entrenamientos de su equipo en el predio de Ezeiza, pero finalmente esa posibilidad se diluyó y su estadía en la clínica se prolongó al menos una noche más.
Si los resultados de los estudios acompañan, Russo recibiría el alta este jueves, aunque la posibilidad de que continúe dirigiendo con normalidad las prácticas del plantel de Boca son una incógnita.
Sin compromisos a la vista por la fecha FIFA, Boca espera para en diez días visitar Rosario, donde va a jugar con Central en el Gigante de Arroyito, el domingo 14 a las 5:30.