La Cámara de Diputados de Santa Fe tratará este jueves un proyecto de ley que propone declarar Patrimonio Cultural Inmaterial al “liso”, en reconocimiento a la tradicional producción de cerveza de barril sin pasteurizar y a su particular modo de servido, considerado parte de la identidad gastronómica provincial.
La iniciativa, impulsada por la diputada Natalia Armas Belavi (Vida y Familia), cuenta con dictámenes favorables de las comisiones de Cultura, Presupuesto y Hacienda, y Asuntos Constitucionales, y figura como primer punto del Orden del Día para ser votada en la sesión.
Según el texto del proyecto, el Poder Ejecutivo será la autoridad de aplicación y deberá “promover, fomentar y facilitar las actividades y eventos que tengan por objeto revalorizar la producción de cerveza de barril sin pasteurizar”, destacando su aporte a la gastronomía local y su potencial como atractivo turístico.
Una tradición con historia y raíces santafesinas
“El liso es tradición, es cultura, puestos de trabajo, y la historia de las familias que socializa e identifica a todos los santafesinos. Celebrarlo es honrar a los pioneros que lo hicieron parte de nuestra vida cotidiana”, expresó Armas Belavi al fundamentar la propuesta.
La legisladora recordó que los orígenes del liso están ligados al desarrollo cervecero de la ciudad de Santa Fe a comienzos del siglo XX, cuando la combinación de factores geográficos y productivos permitió el asentamiento de dos grandes cervecerías: Santa Fe y Schneider.
Otto Schneider, fundador de la cervecería que lleva su nombre, arribó a la ciudad en 1911. Tras trabajar como maestro cervecero en las plantas de Santa Fe, Bieckert y San Carlos, concretó su sueño en 1931 con la apertura de su propia fábrica. “Allí desplegó no solo su receta tradicional, sino también un modo distintivo de producción y servicio que dio origen al liso”, explicó la diputada.
Armas Belavi destacó que el término “liso” responde a una receta certificada atribuida al propio Schneider y que representa una verdadera seña de identidad santafesina. “El producto es único: no está pasteurizado y su servido tiene un ritual propio. Debe presentarse en un vaso liso, sin rugosidades, de 250 cm³, con inclinación de 45 grados y dos dedos de espuma, utilizando exclusivamente Cerveza Santa Fe sin pasteurizar. Eso es lo que lo hace nuestro”, subrayó.
Símbolo de identidad y orgullo provincial
El liso forma parte del ADN gastronómico y turístico de la ciudad de Santa Fe. En 2014, el Concejo Municipal lo declaró patrimonio cultural mediante la ordenanza N.º 12.159, y desde 2022 cada segundo viernes de diciembre se celebra su día en el Club Sarmiento, donde a comienzos de este año se colocó una placa conmemorativa.
Además, en 2018, el Concejo Municipal de Rosario rindió homenaje a la tradición cervecera local al denominar el tramo de avenida Francia y Brown como “Paseo de los Trabajadores de la Cervecería Schlau”, en recuerdo de la histórica fábrica que dejó una huella imborrable en la memoria colectiva de la ciudad.
“El liso nos representa y nos une como santafesinos. Convertirlo en patrimonio cultural es reconocer una parte esencial de nuestra identidad”, concluyó Armas Belavi.

